Me debatía entre escribir sobre la última sandez del egregio líder que no lo fue de la España que iba bien, concluir mis diatribas sobre el hombre que se hace llamar Benedicto XVI o no hacer ninguna de ambas cosas.
Pero entonces consulte el blog de un petardo -eso es lo que se hace llamar él- y descubrí un trabajo de traducción excelso de los exabruptos y las incongruencias que George W. Bush soltó ante las Naciones Unidas.
Gracias a Javi por el trabajo que se ha tomado en iluminar nuestras mentes poco acostumbradas a la lengua de la Pérfida Albión, trabajo que podeís consultar en el enlace que hay en mi blog. Pero, como buen demonio y como buen obseso de la semántica, yo me quedo con el primer párrafo.
"Esta mañana quiero referirme al mundo de esperanza que está a nuestro alcance, un mundo más allá del terror, donde los hombres y mujeres comunes sean libres de determinar su propio destino, donde las voces de la moderación tengan fuerza, y donde los extremistas estén marginados por una mayoría pacífica- Este mundo puede ser el nuestro si lo buscamos y trabajamos juntos.''
Puede parecer que es sólo un preludio bellamente elaborado por aquellos que fabrican los discursos de George Bush cuando George Bush les deja elaborarlos y no se dedica a decir estupideces por su cuenta. Pero no lo es.
Puede parecer que no incluye ninguna clave política errónea, ningún análisis estratégico viciado o ningún dato manipulado. Puede parecer una declaración de intenciones asumible por todos. Pero no es así.
Y no es así por el lenguaje.
Empieza hablando en un plural que le incluye "está a nuestro alcance" pero de repente cambia a uno que no le incluye "los hombres y las mujeres comunes sean..." ¿Es que George Buesh no se considera un hombre común? Obviemente ni él, ni sus hacedores de discursos le consideran un hombre normal. El es el líder del mundo libre y esa condición no está en discusión, no está en tela de juicio. Él no es alguien que hable desde la necesidad que tenemos todos los mortales de saber que nuestro mundo estará en paz, por lo menos mañana. Su sistema le considera, dada su posición, un hombre superior y asume que todo el mundo debe considrarle así. En realidad, en eso no se diferencian mucho del resto del mundo. Nosotros tampoco le consideramos un hombre normal. Aunque por motivos y en una escala diferentes.
Las voces de la moderación tengan fuerza...
No peso, no repercusión, no prioridad. Ninguno de los sustantivos que indicarían disposición a convencer. Sino fuerza. El único sustantivo que implica que, si no se convence, se vence y punto. Estados Unidos puede desear un mundo de moderación, pero esta dispuesto a imponerlo y mantenerlo por la fuerza. Ellos son los que deciden cual es el concepto de moderación y su fuerza es la herramienta para imponerlo. La fuerza de la moderación. Dos conceptos que se repelerían en cualquier discurso salvo en uno que se fundamente en la forma de ver el mundo desde la política de Estados Unidos.
donde los extremistas estén marginados por una mayoría pacífica...
Aunque la intención parece buena y seguramente lo sea -no todo lo que se dice desde la Administación estadounidense es sinónimo de maldad. Aún no soy Hugo Chaves- de nuevo el concepto elegido es determinante a la hora de valorar las intenciones de Bush y su administración.
Convencer o desarmar o dejar sin argumentos sería lo ideal. Eso es lo que hubiera dicho cualquier líder europeo o mundial con un poco de reflexión y de visión política.
Relegar incluso sería aceptable puesto que supone apartar a alguien sin ejercer, por decirlo de algún modo, una efectiva violencia, sino una resistencia no violenta a sus posturas.
Pero Bush elige marginar. Marginar exige violencia. Exige un trabajo sistemático de imposición de unos presupuestos y de identificación y retención de determinados elementos. Se puede marginar en un ghetto, se puede marginar en un campo de prisioneros en Bahía de Guantánamo, Cuba, cosa que no puede hacerse si se trata de relegar, de dejar sin argumentos o de convencer.
No hay nada nuevo bajo el sol. Bush y su administración siguen queriendo imponer por medio de la fuerza su visión del mundo. Por más que lo decoren.
Bush quiere un mundo "mas allá del terror" en su casa no "más allá de la violencia" en la de los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario