Andaba yo tan celebrante por amores ajenos y tan preocupado como casi siempre por los propios que casi se me pasa el glorioso momento matemático que lució Esperanza Aguirre en el pleno de investidura de la Alcaldía de Madrid. Esa que ella consideraba propia y ahora los sufragios -ese rito tan molesto llamado democracia- le han dado a otra persona de nombre Manuela Carmena y desde hace pocos días de profesión alcaldesa de Madrid.
"La suma de votantes de posiciones moderadas fue muy superior a la de una opción que pretende cambiar de forma radical los fundamentos de la política española. Dos tercios de los madrileños están por opciones moderadas y sólo un tercio por el cambio radical”.
Con este ejercicio de combinatoria se descolgó la doña como argumento para no sé sabe muy bien si restar legitimidad a la nueva alcaldesa de Ahora Madrid o para reclamar su derecho de sangre, pernada y nacimiento a agarrar el bastón de mando del municipio capitalino.
En cualquier caso, las permutaciones con repetición de cuatro elementos tomados de X en X que se gasta la señora Aguirre son una trampa tan formal que parece mentira que se la hayan pasado, tan material que haría temblar las carnes a Pitágoras, Leibniz o Neper si aún tuvieran carnes en sus catafalcos por trémulas que fueran.
Me explico.
Aguirre hace una combinación viciada al decir que "los madrileños han elegido mayoritariamente posiciones moderadas".
Primero mete al PP, el PSOE y Ciudadanos dentro del saco de las posiciones moderadas -cosa que yo, por ejemplo, nunca diría del PP-, lo cual puede comprarse y luego hace la trampa de las motivaciones, deduce, infiere o simplemente se invente que se les ha votado por "ser moderados".
No por ser socialistas o por ser conservadores o por defender la patria y la bandera o por prometer acabar con la corrupción. Se les ha votado por ser moderado.
Y así la arcaica y vetusta política madrileña recupera la política que más le gusta, en la que mejor se mueve. La política de bloques.
Rojos contra Azules, Constitucionalistas contra No Constitucionalistas, Españolistas contra Nacionalistas -de otras nacionalidades, se entiende-, Socialistas contra Liberales... Y ahora moderados contra radicales.
Vamos el vicio de interpretación evangélico más extendido: el que no está conmigo está contra mí.
¿Donde está la manipulación de Tita Espe? Muy sencillo. Ella que debe ser de letras y para eso lee a "Sara Mago", olvida que la combinatoria es aleatoria.
Así que igual se podría decir que "la suma de votantes de posiciones de izquierda y centro izquierda fue muy superior a la de derecha y centro derecha". Treinta y seis concejales para PSOE, Ahora Madrid y Ciudadanos -que se define como de centro-izquierda, no lo olvidemos y no lo creamos, pero se define así-, contra 21 del PP.
O también podríamos agruparlos por "los votantes que quieren que gobierne el PP y los que quieren que gobierne cualquier otro", con lo cual la proporción sería idéntica.
O realizar una combinatoria basada en el criterio de "los votantes que han optado por los partidos tradicionales y los de nuevo cuño" con lo cual PP y PSOE ganarían por tres ediles.
O por los "votantes que han querido dar su sufragio a partidos que han prometido acabar con la corrupción", con lo que el PP -única candidatura municipal madrileña que no ha hablado ni escrito una sola palabra sobre el asunto- se quedaría de nuevo solo en minoría abrumadora.
O por los "votantes que quieren que una mujer sea alcaldesa y los que prefieren que lo sea un varón". Con lo cual, pese a la mayoría abrumadora que resultaría de la suma del PP y Ahora Podemos, habría en la capital un gobierno municipal inestable. Interesante pero ciertamente inestable.
En fin, que podríamos seguir ad eternum o ad infinitum que dirían los matemáticos.
Conclusión. De nuevo Esperanza Aguirre manipula, inventa y elige la mejor opción de todas las posibles para ella para arrimar el ascua a su sardina.
Porque, como el voto es secreto, nadie puede saber si los votantes han votado a uno u otro por ser moderados o por cualquier otro motivo.
Y lo peor es que me temo que mañana escucharé repetir ese argumento para justificar a Aguirre y cargar contra Carmena por más que en muchas otras cosas demuestren ser inteligentes.
Es lo que tienen las permutaciones sin repetición de 4 elementos tomados de X en X
4 comentarios:
""la suma de votantes de posiciones de izquierda y centro izquierda fue muy superior a la de derecha y centro derecha". Treinta y seis concejales para PSOE, Ahora Madrid y Ciudadanos -que se define como de centro-izquierda, no lo olvidemos y no lo creamos, pero se define así-,"
También no deberíamos olvidar -aunque no creer- que los de Podemos -digo "Ahora Madrid"- dicen que ni son de derechas ni son de izquierdas...
Y créeme, aunque no te lo creas, pero la última vez que voté fue cuando el referéndum de la OTAN, en 1986 (y voté que NO).
"Esa que ella consideraba propia y ahora los sufragios -ese rito tan molesto llamado democracia- le han dado a otra persona de nombre Manuela Carmena y desde hace pocos días de profesión alcaldesa de Madrid."
La verdad es que había otros textos tuyos y me habían gustado. Hoy tengo que reconocer que me has decepcionado. Lo siento, pero creo que estás manipulando hechos para intentar defender a los de tu opción política. Porque es evidente que Manuela Carmena ha sido elegida por los votos de los concejales de distintos partidos políticos, y no por los "sugragios" de los votantes madrileños, que se han repartido entre muchas opciones (entre ellas las de que los que no han votado). En países como Francia, el presidente elegido es el candidato que más sufragios recibe, mientras que en España, ni el presidente del Gobierno ni los alcaldes son elegidos por los "sufragios" (directos) de la gente. Son los concejales elegidos de los distintos partidos, los que -gracias a pactos entre ellos- deciden votar a uno u otro candidato. Me parece legítimo que simpatices con Manuela Carmena, pero, por favor, no trates de hacernos creer que esta señora ha sido elegida alcalde por los "sufragios" de la gente. Porque si previamente a las elecciones la señora Carmena se hubiese presentado como líder de la misma coalición de partidos cuyos concejales ahora le han votado, admitiría que hubiesen sido los "sufragios" quienes la han llevado a la alcaldía. Pero eso no es lo que realmente ha sucedido.
Y pasemos a un ejemplo que podría darse en los próximos meses: hay elecciones generales, y el PP gana por minoría simple, pero no tiene la mayoría absoluta. El PP se pone de acuerdo con Ciudadanos, y los diputados electos de este último partido deciden votar la investidura otra vez de Rajoy. ¿Dirías entonces que Rajoy ha sido otra vez elegido presidente del Gobierno gracias a los "sufragios"?
Y que conste, aunque no me creas, que no simpatizo para nada con la señora Aguirre.
Y sobre el primer comentario he de decirte que cualquiera de las combinaciones vale de ejemplo y no son más que eso, un ejemplo.
El mensaje simplemente es que Esperanza Aguirre utiliza la combinación de fuerzas que le interesa como si no hubiera otra posible y dando por sentado que el motivo por el que se ha emitido el voto es porque "son moderados".
Esa es la manipulación que se denuncia más allá de que los ejemplos de otras posibles combinaciones están más o menos ajustados.
Creo recordar que los concejales han emitido "sufragios", es decir han depositado votos en una urna y lo han hecho en representación de aquellos que les han dado sus sufragios.
Puede que a tí la democracia indirecta -como a mi- no te parezca la mejor pero de eso ha decir que Manuela Camerna no ha sido puesta en la alcadía por los sufragios de los votantes va un abismo.
Segundo punto, comparar la elección del Presidente, cabeza del Estado Francés, con unas elecciones municipales o legislativas es mezclar churras con merinas.
Se elige al candidato más votado porque es una votación en dos rondas ¿se organizan igual las elecciones a la Asamblea Nacional, a los ayuntamientos? Me temo que no y se producen toda suerte de alianzas post electorales surgidas de la misma democracia y los mismos sufragios. Y también de forma indirecta.
Puede que no me creas pero no es cuestión de si simpatizo con ella o no. Es que ha sido elegida por los sufragios.
Los votantes han depositado su confianza en un partido político. Ese partido político ha depositado su confianza en una alcaldesa -aunque no sea de su partido-. Ergo y por definición, los sufragios han elegido a Manuela Carmena.
No veo manifestaciones ni protestas masivas de los votantes del partido que ha apoyado a Manuela Carmena afirmando que ese no era su deseo, así que, te guste o no, la han elegido los sufragios, de forma indirecta, pero los sufragios.
Y a tu pregunta sobre Rajoy, la respuesta es sí. Mientras los votantes de Ciudadanos no estén en contra del apoyo dado a Rajoy, sí.
Así funciona la democracia indirecta. Simpatice yo o no con Manuela Carmena.
Que no solamente se defienden las cosas porque se simpatice con ellas.
Un saludo.
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